Es increíble la cantidad de sentimientos que pueden esconder dos simples palabras, pero es sólo así: "te extraño".
Y no te extraño porque quiera algún tipo de relación amorosa contigo, es simplemente porque extraño a mi amigo.
No me interesas en absoluto como pareja. Hago esta aclaración porque la gente tiende a confundir las cosas, a creer que no es posible querer tanto a un amigo que los sentimientos sean más que eso.
Extraño tu sonrisa, tus chistes, tu peculiar sentido del humor, tan característico de ti.
Esa forma tuya de hacer de lo cotidiano algo especial, esa forma de hacerme sentir que siempre puedo contar contigo.
Se que quizá cometí errores, pero desafortunadamente soy humana, y he cometido muchos a lo largo de mi vida, y perder tu amistad es uno de los que más me ha dolido.
Una vez me dijiste que si algún día necesitaba algo, sin importar las circunstancias, no dudara en pedírtelo. Sin embargo lo que necesito es a ti, saber que no perdí para siempre a mi amigo, saber que aún hay solución.
Quizá estoy pidiendo demasiado, pero como ya lo dije: te extraño.
Y no tengo palabras para describir lo que siento cada vez que pasas por mi mente. Me atañe una profunda tristeza, se disuelve dentro de mi invadiendo cada centímetro de cordura, para después dejarme recordando el inmenso vacío que dejaste.
Y sólo así: te extraño...
Y a pesar de ello no pienso irrumpir en tu vida, se que eres muy feliz y comparto tus alegrías. Me siento orgullosa de todo lo que has logrado, de ver como has seguido tus sueños sin importar los obstáculos. Sigue así, sé que llegarás muy lejos.
Te quiero, siempre lo haré...